Después de perder en París ante el París Saint-Germain por un 4-0, el equipo pudo dar vuelta al marcador en el Camp Nou con un marcador de 6-1 con goles de Suárez, Messi, Neymar y Sergi Roberto más un autogol de Kurzawa, camiseta de japon que supusieron la mayor remontada hasta el momento en la historia de la competición. Concluyó con la mejor defensiva (22 goles), equipo con menos derrotas (1), mejor equipo visitante (44 puntos), y mejor subcampeón en la historia de las máximas ligas europeas.